martes, 2 de marzo de 2010

Fin.

-mientras se me apaga el corazón,
entre la piel desnuda,
sin poder amanecer,
un beso, un adiós…
tal vez en otra vida te amare…

sábado, 13 de febrero de 2010

Sobre el amor y el tiempo... (reflexiones en la ducha)


Todos latimos dentro de un mismo corazón universal,
Nacimos bajo el mismo cielo,
Y aunque hay un mar que nos separa,
También hay un cielo que nos une,
El amor es como la poesía,
Es un momento, un trozo de eternidad,
Nace del fragmento de tiempo exacto donde se crea la palabra,
Donde nace el amor esperado,
Por eso un poema siempre esta incompleto,
Es un pedazo de tiempo,
El dia que este se completa,
El amor muere, la poesía se acaba
Por eso no hay que buscarlo,
Las cosas emanan de una fuente misteriosa,
Hay que dejar que las manos,
Den a luz letras por si solas,
Hay que dejar que la noche traiga consigo,
La lucidez de las palabras,
Aquellos que somos criaturas de la noche,
Sabremos entenderlo...

- y a quellos con la maldicion en la frente
seguimos esperando -
... Nocturno-
Francisco Hernàndez Campos

viernes, 1 de enero de 2010

- Un nuevo amanecer - (Monologo)

Los años son meses, llenos de horas sin tiempo, y así de fácil se van, como agua corriendo hacia el desagüe, nadie las puede detener, es como atrapar el agua entre los dedos, como intentar llenar las manos de recuerdos, como jugar a perseguir las sombras, no se puede es cierto, -pero es divertido-, insisto… este año roto ya no nos sirve, hay que tirarlo a la basura, o quemarlo junto con algún libro de Sabines, simplemente, olvidarlo.
Se coagulan las horas en el tiempo, pasan, y yo lleno mi cuerpo de nicotina, abrazo la niebla con los parpados, aprieto los puños y los dientes, acomodo mis soledades por colores, por texturas, por soledades viejas, soledades de mar, y soledades de ti.
-Dicen que antes del amanecer, la noche es mas oscura-, si te contara de estas ultimas noches Marilu, tan largas, tan frías, tan… blancas. Caminando por los parques, tocando la guitarra, siempre a solas, perdiéndome, callado en silencio, frustrado tal vez… así entonces, me encenderé un cigarro, y esperare a que amanezca. Y cuando se despeje el cielo, cuando se valla el frió, cuando cruces por esa puerta y me deje de gritar sobre la almohada tu retrato, cuando salga el sol por nuestro horizonte, -Ja-… cuando se me acaben los cigarros, cuando dejen de crecer letras sin dueño de mis manos, y ardan las nubes sobre un cielo anaranjado, entonces ese día… amada, será un nuevo amanecer.

... cada año que se va, es una vela que se apaga...
... paz, buena vibra, y mucha luz
a todos aquellos que me hacen
digno de su lectura, Gracias.
N ö ç t µ R n Ø
(Francisco Hernández Campos)